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miércoles, 22 de febrero de 2017

Secado y Curado

En el post anterior explicamos cómo cosechar Cannabis. Ahora vamos hablar del final del proceso, es decir, el secado y curado.
SECADO

Empecemos por el principio: ¿para qué sirve el secado?

El secado se realiza para que el THC que tiene el cannabis sea más potente, ya que en un primer momento su efecto es menos psicoactivo. Además, si el proceso se hace de forma adecuada, tanto el sabor como la combustión de la weed será mejor.

El proceso de secado

El cannabis debe secarse de forma uniforme durante 5 o 7 días para conservar el THC, y dar un sabor y aroma más suave y dulce. Esto puede acelerarse quitando los  tallos y las hojas más grandes. No obstante, se recomienda dejar algunos tallos y hojas para que la planta tenga tiempo suficiente para eliminar la clorofila y los otros pigmentos que causan el mal sabor.
Durante el secado, los cogollos se deben mantener a temperaturas entre 18-24ºC y con una humedad entre 45-55%. De lo contrario se secarán muy rápido causando un mal sabor, o muy lento aumentando la probabilidad de aparición de hongos. Para controlar estos aspectos se pueden utilizar ventiladores , extractores o humificadores.  
El secado se puede realizar en varios lugares. Una opción es utilizar un armario vacío con ventilación. En él puedes colgar los cogollos boca abajo utilizando un hilo, de esta forma el secado será uniforme. Otra opción, es hacerlo en una caja. Esta puede ser de madera o cartón, lo importante aquí es recordar abrirla diariamente y darle la vuelta a los cogollos. Así se disminuirá la humedad evitando el moho. Para saber cuándo están listos debes curvar el tallo y este debe quebrarse. No doblarse.

**Tip: Déjalas apartadas de plantas que sigan cultivándose, ya que las condiciones ambientales no son adecuadas, y además serán más propensos  a adquirir plagas.

CURADO
¿Y después? El curado

El curado es el último paso antes del almacenaje. En esta etapa, los cogollos terminan de secarse totalmente, para así poder guardarse sin que aparezca moho. Además, esta humedad, que queda tras el secado, afecta significativamente al sabor y la potencia Así que ¡espera un poco más antes de empezar a fumar!
Cuando los cogollos estén secos, guárdalos en un recipiente hermético de vidrio y déjalo en un lugar oscuro. Con esto evitarás el contacto con la luz, el calor y el roce dado que estos aceleran la degradación de los cannabinoides.  Debe ser de vidrio para evitar que tome aroma a metal u otro material.

**Tip: introduce cáscaras del limón en tus frascos para darle un toque fresco.

Durante la primera semana, abre el contenedor todos los días entre 10 y 15 min para disminuir la humedad. Para saber cuándo está listo, fíjate en que haya perdido el 75% de su peso inicial. Esto puede tardar algunos días, y en los algunos casos, un par de semanas.

ALMACENAJE

Para finalizar, consérvalos en los contenedores herméticos y así se preservará mejor el aroma, el sabor y la potencia. Si tu recipiente está totalmente sellado, lo puedes almacenar en el frigorífico. En el caso contrario, ubícalo en un lugar oscuro y fresco.

Fuente: La biblio del cultivador, Jorge Cervantes.

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